Un día soleado, una niña guapisima vestida de Comunión y una invitada especial, una preciosa mariposa que quería estar con nosotros ese dia. Yo lo digo, es por la magia que desprende Ana Maria, nunca en mi vida me ha pasado eso y mira que llevo unos años dedicándome a eso. Es lo bonito de mi trabajo, cada sesión me regala algo especial y no lo digo por la mariposa. Los niños son lo que me llenan de su inocencia, de su felicidad, me quedo con unos recuerdos preciosos.
Muchas gracias familia...
Muchas gracias familia...